En
aquella época se fundó con el fin de acercar y unir a todos los hombres de
buena voluntad productores o no, pero con las mismas ansias de ideal superación
en todas las manifestaciones de la vida y defender a los asociados en sus
legítimos derechos, creando las virtudes sociales y culturales necesarias para
mantener el orden y la paz, suprema bendición dispensada a los pueblos
generosos y progresistas.
Actualmente
se reasume el compromiso, sin claudicaciones, de continuar la obra de los
visionarios fundadores, con los desafíos siempre complejos que los nuevos
tiempos suponen, bregando por la constante superación en defensa del sector
agropecuario.